viernes, junio 26, 2009

Pía Barros: el laberinto de las microficciones

Cada color un sentimiento, cada sentimiento una palabra, cada palabra una imagen, cada imagen un cuento y, al final, la escritura se convierte también en un pretexto. Un pretexto para reconocernos en la sensibilidad.

Pía Barros, escritora chilena, inauguró el festival de la revista El Malpensante con lo que más le apasiona a parte de la creación literaria: compartir y transmitir el conocimiento en sus talleres.
Ante un auditorio de aproximadamente treinta personas nos invitó a soñar al abrir esa puerta de la imaginación que se esconde en las cosas más sencillas: hojas de varios colores, algunas caricaturas y, por supuesto, la fuerza de la palabra. Salieron tantas historias como imágenes y cada uno tuvo la oportunidad de echarlas a rodar. Porque ese es el sentido de los talleres de Pía: romper el hielo, integrar a los participantes y tejer relatos que,a pesar de ser
individuales, nacen precisamente de aquel intercambio de voces.


Habló de lo cotidiano y de lo académico. Reconstruyó sus inicios en los años de la represión Argentina. “Por esa época las reuniones estaban prohibidas por los milicos. No había posibilidad de realizar talleres. Y cuando nos encontrábamos en tertulias clandestinas los hombres,generalmente, empezaban a hablar de literatura muy tarde, justo después del juego de la seducción y el licor”. Por eso se dedicó a rotar la palabra y generar los espacios donde mujeres humildes contaban sus vidas a través de cartas que, más adelante, pegaban en las estaciones del metro. Entonces la contundencia de ese discurso se esparcía- igual que un eco- en los cruces de calles y avenidas.


Confesó que es una lectora compulsiva de la ciudad. En cualquier esquina se encuentra una historia. Basta leer los innumerables grafitis que se pasean itinerantes por los muros y sorprenderse ante esas pocas líneas capaces de reflejar todo un Universo.Un buen ejemplo de "Microficción", género cuya brevedad no admite facilismos aparentes. De ahí la importancia de dejarse llevar por ese detonante que no es más que el cosquilleo en el estómago, producto de un momento único e irrepetible. Puede ser una imagen, un gesto, una conversación, un recuerdo...


El tiempo fue corto, pero muy bien aprovechado.Además de la microficción nos ofreció un panorama de técnicas narrativas de grandes autores. Es el caso de Julio Cortázar y su cuento "Casa tomada". En él un sujeto indeterminado se encarga de guiarnos(o de perdernos) en la tensión que genera lo que carece de identidad.


Regresamos al juego aunque, a decir verdad, jamás lo abandonamos. Hubo espacio incluso para lo anecdótico. Mientras Pía desarrollaba la sesión una de las asistentes dijo: "disculpen que interrumpa. Me acaba de llegar un mensaje de texto diciendo que murió Michael Jakcson". Luego de uno que otro comentario salimos de esa trampa que nos tendió la globalización. Quizás se trató de uno de esos detonantes a los cuales hay que hacerle caso. A lo mejor nace una historia. Lo único cierto es que, en medio de la claridad y el sentido del humor de Pía Barros, la palabra tuvo, además, el privilegio de sumergirse en buenas dosis de picante e ironía.







12 comentarios:

Ruth L. Acosta dijo...

Hola Mi querido Carlos Eduardo...

Que lindo que tengas la oportunidad de nutrirte de esos grandes talentos y que te enriquezcas día a día con tan gratas experiencias...

Nunca dejes de escribir Carlos, que es lo tuyo, creo que desde que estabas en el vientre de tu madre, ya traías en tu mano una pluma...

Gracias por ser una persona tan sensible y generosa...

Te quiero mucho, saludos y deseo que estés bien...

Un beso desde México,

María Marta Bruno dijo...

Dos cosas...

Una, me alegro de que haya podido disfrutar del taller, que haya podido aprehender lo que Pía Barros tenía para dar. No todos los días se presentan estas oportunidades, no?

Otra... qué poco criterio, interrumpir un taller literario con un mensaje de texto, como si se hubiese tratado del inicio de la tercera guerra mundial!!!

Es notable cómo se ha degradado todo de tal manera que la muerte de un artista en franca decadencia detiene los relojes.

Tal vez usted, en el curso del taller, tuvo sólo esa perspectiva, pero la CNN dedicó horas a hablar de eso, y aquí en Argentina, en la última jornada de proselitismo electoral antes de la veda previa a las elecciones del próximo domingo, los candidatos competían con las imágenes mil veces repetidas de Thriller, y de un muchachito negro que una vez se volvió blanco.

A veces me pregunto si todavía tenemos una escala de valores o apenas un peldaño.

Muy bello su relato, estoy segura de que le hace mucha justicia a Pía Barros.

Alicia Abatilli dijo...

Escrubes de Pía como si fuese tu amiga, la conoces y hablas de ella de manera maravillosa.
Felicitaciones a ambos por encontrarse.
Alicia

Borrasca dijo...

Quien aguantará tan creído a mi cachaco lindo al lado de Pia????

Te ves divinooooooooooo como siempre

Besitos cargados de cariño

Roxanne dijo...

Debe estar muy bueno estar en un taller con alguien así... En otros tiempos también asistía a talleres literarios con gente bastante reconocida de por aquí y me gustaba mucho...

Te dejo un besito muy grande

Roxxi

pd: ¿leíste el mail que te mandé?

Alma Mia dijo...

Un saludo cordial y lleno de cariño, para ti, y mi compatriota.

Lindo relato. Es verdad, esos talleres son de maravillas!

Un abrazote fraterno amigoteeee!

sky walkyria dijo...

sentir escribiendo,
sentir charlando,
sentir leyendo,
sentir y honrar así a la vida

abrazos sentidos

Mariel Ramírez Barrios dijo...

Guau
una sana envidia me genera tu maravillosa descriciòn de uno de esos tiempos que a uno le gustarìa compartir con amigos,verdad?
Pd1
El mensaje de texto me matò.
Pd 2 que lindo que estassssmi magoooooooooooooooooooo

Geanina Codita dijo...

querido amigo,
bienvenido. Espero hacer esto cada vez que.

Un hermoso día!

Anónimo dijo...

Maravillosa la experiencia. Me la imagino.

Un fuerte abrazo para ti.

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

Gracias por tu entrada gratificante
besos y amor
je

mj dijo...

Me gusta verte así, feliz disfrutando con la gente maravillosa que la vida nos pone a veces en el camino de los días...
Un beso fuerte amigo mío y mago de corazones.
mj